La tumba de Anfípolis, ¿quién se esconde en ella?

Anfípolis fue una ciudad originalmente griega que el Reino de Macedonia conquistó en el año 357 a.C. por parte de Filipo II, padre de Alejandro Magno. A pesar de no haberla incorporado rápidamente al reino sí que fue adquiriendo importancia dentro de Macedonia debido a las minas de oro y plata que se encontraban en el cercano monte Pangeo y que posiblemente fueron la motivación de la conquista por parte de Filipo II.

Vista aérea del yacimiento de la Tumba de Anfípolis

Vista aérea del yacimiento de la Tumba de Anfípolis

 

Actualmente la zona donde se encontraba la ciudad pertenece a Grecia y se situa al norte del pais. En 2012 se descubrió una gran tumba pero no fue hasta 2014 cuando un equipo griego dirigido por la arquéologa Katerina Peristeri entró en ella.  En la cima del túmulo encontraron restos de mármol utilizado en el León de Anfípolis, escultura encontrada a dos kilómetros de distancia en 1912 con lo que los expertos suponen que la escultura originalmente se encontraba señalando la tumba de Anfípolis y que a mediados del siglo XX, Oscar Brooner relacionó con Laomedonte de Mitilene, general de Alejandro Magno.

Los expertos han localizado un monógrama tallado en la piedra que podría pertenecer a Hefestión, ministro y segundo en el mando de Alejandro Magno, que falleció en el año 324 a.C., las fechas coinciden con la datación de los restos que ha hecho Peristeri (325 a.C. – 300 a.C.)

Monograma de Hefestión

Monograma de Hefestión

Otros restos importantes encontrados son dos excepcionales cariátides de unos 3,5 metros de altura y dos esfinges de marmol de casi 2 metros de altura colocadas en la parte superior de la entrada principal de la tumba. También se ha descubierto un fresco con restos de pintura aún visible y un mosaico representando el rapto de Perséfone por Hades.

Esfinges de la Tumba de Anfípolis

Esfinges de la Tumba de Anfípolis

Cariátide de la Tumba de Anfípolis

Cariátide de la Tumba de Anfípolis

Todo ello se encuentra en la colina de Kasta cuyos 500 metros de circunferencia es rodeada por un muro de mármol de 3 metros de altura.

Por las dimensiones de la tumba y por no haber sido saqueada previamente al encontrarse enterrada los expertos consideran que en su interior puede haber restos que nos revelen datos importantes de la historia. Posiblemente no sea la tumba de Alejandro Magno, pero podría ser la de alguien muy cercano al gran estratega macedonio.

Para más información, recomiendo ir a la web The Amphipolis Tomb que contiene todos los datos y noticias sobre el avance de las investigaciones. Las fotos de este post han sido tomadas de esa web, excepto la que ha sido tomada gracias a Google Maps.